Trae a mi memoria mis experiencias, recordando cuando tenia 20 años y habia trabajado haciendo de todo, siendo uno de los últimos trabajos como traductora. Sin embargo, necesitaba ganar mas dinero para ayudar en nuestro hogar.
Y un buen día tome el directorio telefónico y me puse a buscar diferentes tipos de empresas y encontré el telefono de un banco y llamé. Me contestó una joven y le pregunté si había alguna vacante y me respondió: Sí hay un puesto nuevo…pero si vienes inmediatamente tal vez tengas oportunidad! Y me fuí como estaba, en un jumper, sueter y zapatillas, no pensé en mi imagen sino en mi necesidad.
Cuando llegué fui entrevistada y a la semana fui contratada y duré alli casi 25 años hasta que el banco fue vendido. Y despues de eso, no quede sin trabajo, fui contratada en otros dos lugares.
Dios siempre tiene un empleo para nosotros…no importa la edad que tengas, en la vida cristiana no hay jubilación, Jesucristo siempre tiene una ocupación para nosotros en su obra y mientras estemos en este mundo debemos estar ocupados,para eso nos ha dado talentos que debemos usar y no dejarlos perder.
